13/09/25

Por qué los bitrenes generaron una nueva disputa entre automotrices, empresas logísticas e ingenieros viales

Por Antonio Rossi


Los contrapuntos por la desregulación de los bitrenes agudizan las diferencias planteadas entre las terminales automotrices y las operadoras logísticas

En medio de la tensión política y los cuestionamientos económicos que enfrenta la administración de Javier Milei tras la derrota electoral bonaerense; la libre circulación de los bitrenes de camiones por todas las rutas nacionales, que fue aprobada a fines de agosto, sigue siendo motivo de polémica entre las empresas de transporte y los especialistas del sector vial.

Lejos de aplacarse, los contrapuntos por la desregulación de los bitrenes volvieron a agudizar las diferencias planteadas entre las terminales automotrices y las operadoras logísticas-- que están a favor por la reducción de costos-- y los ingenieros viales, que la rechazan por las consecuencias negativas que tendría en materia de infraestructura y accidentes en las rutas.

La resolución 1196/2025 firmada por el ministro de Economía, Luis Caputo dispuso la ampliación del funcionamiento de los bitrenes a la totalidad de la red vial nacional con el argumento de que permitirá lograr “una optimización de los costos logísticos, la multiplicación de la capacidad de carga y la dinamización de proceso de reactivación económica”.

La medida habilitó la circulación por casi todas las rutas nacionales de los equipos de transporte conformados por camiones con dos semirremolques articulados que tengan una longitud entre paragolpes extremos de hasta 30,25 metros y un peso bruto de hasta 75 toneladas.

Hasta fines de agosto, los bitrenes de 30,25 metros solo estaban autorizados a movilizarse en la autopista Rosario–Córdoba y entre la Capital Federal y Zárate en el horario de 22 a 7. Por su parte, los equipos de hasta 25,50 metros podían circular en unos 15.000 kilómetros de las rutas más transitadas que integran la red vial nacional de 41.000 kilómetros.

La primera empresa de peso que salió a contratar ese tipo de transporte fue la automotriz Renault con un bitren de contenedores que trasladó autos y repuestos entre el puerto de Buenos Aires y la fábrica cordobesa de Santa Isabel.

Tras apoyar el cambio normativo, el presidente de la filial argentina de Renault, Pablo Sibilla sostuvo que “este tipo de medidas contribuye a mejorar la competitividad de la industria automotriz porque nos permite reducir costos logísticos, ampliar la eficiencia y, al mismo tiempo, disminuir la huella ambiental”.

Agregó, además, que representa un nuevo avance “hacia un sistema de transporte más competitivo, sustentable y moderno con una menor cantidad de vehículos requeridos para trasladar el mismo volumen de carga, lo cual disminuye la circulación de camiones en rutas, el consumo de combustible y el desgaste de la flota”.

Por su parte, la Federación Argentina de Entidades de Transporte y Logística (FAETyL) también avaló la medida señalando que “constituye un paso fundamental hacia la modernización del sistema de transporte argentino, al posibilitar la optimización de recursos, la reducción de costos y la elevación de los estándares de productividad en toda la cadena de valor”.

Tras indicar que “los bitrenes demostraron ser una herramienta eficaz para mejorar la eficiencia logística”, la entidad encabezada por Hernán Sánchez que tiene 218 empresas asociadas destacó que “a partir de ahora será clave contar con la infraestructura adecuada y modernizada que acompañe la implementación de la normativa, garantizando que rutas, puentes y corredores dispongan de las condiciones necesarias para la circulación segura y eficiente de todo tipo de vehículos”.

La postura en contra de los bitrenes provino de los ingenieros viales que integran la Asociación Gremial de Profesionales y Personal Superior de Vialidad Nacional.

El análisis de los alcances e implicancias de la medida que hicieron los especialistas de sector vial alertó que “si bien supone un beneficio económico para los transportistas, el cambio genera graves consecuencias en materia de infraestructura, seguridad vial y costos sociales”.

En lo que respecta a la infraestructura vial, el trabajo destacó lo siguiente:

  • El tránsito de bitrenes incrementa la carga transportada por unidad en circulación, elevando el Peso Bruto Total Combinado (PBTC) y las cargas dinámicas que ponen en riesgo a las estructuras como puentes y alcantarillas.
  • Implica mayores costos de construcción, reparación y mantenimiento que recaen en el Estado y, por ende, en la sociedad.
  • Así, el ahorro para algunas empresas transportistas se convierte, en los hechos, en un subsidio indirecto financiado con recursos públicos.

En cuanto al impacto en la seguridad vial, el informe advirtió que:

  • La mayor longitud y peso de los bitrenes reducen la maniobrabilidad y los tiempos de respuesta en situaciones de emergencia.
  • Se incrementa la probabilidad de colisiones frontales y laterales, especialmente en rutas de calzada simple.
  • Los siniestros viales generan costos económicos cuantificables en salud, seguros y daños materiales. A ellos se agregan los costos sociales irreparables vinculados a la pérdida de vidas humanas, lo que entra en contradicción con el artículo 42 de la Constitución y los compromisos internacionales asumidos por la Argentina.
Según la posición de los ingenieros viales, la ampliación de circulación “se dictó sin estudios técnicos del ente competente que avalen la capacidad de la red vial nacional para soportar dichos equipos de transporte. A eso se agrega el hecho de que la incorporación generalizada de bitrenes traslada a la sociedad los costos de infraestructura y de siniestralidad, en beneficio exclusivo de un sector transportista”.

Como conclusión, el análisis de los especialistas viales le recomendó al Gobierno llevar adelante tres acciones correctivas y preventivas orientadas a: limitar la circulación de bitrenes a las rutas previamente evaluadas; realizar estudios de impacto técnico, ambiental y de seguridad antes de habilitar nuevos tramos y destinar un fondo específico proveniente del ahorro logístico empresarial para financiar el mantenimiento vial y programas de seguridad.

Fuente: iProfesional