14/04/25

Hidroeléctricas: Javier Milei usa como excusa a Neuquén y Río Negro para postergar la reprivatización

El Gobierno aprobó una nueva prórroga para el llamado a licitación de las represas. Figueroa y Weretilneck reclaman más tiempo. Interna energética y pliegos.

Por Antonio Rossi



Las hidroeléctricas en la era Javier Milei

Con la excusa de que debe conocerse la opinión de las provincias de Neuquén y Río Negro sobre los alcances del pliego; el gobierno de Javier Milei estableció una nueva prórroga para la reprivatización de las centrales hidroeléctricas del Comahue. Estas concesiones están vencidas y fueron extendidas de manera provisoria hasta el segundo semestre de este año.

Se trata de las licitaciones para volver a concesionar las represas de El Chocón, Cerros Colorados, Alicurá y Piedra del Águila, que debían iniciarse el 9 de abril y que ahora podrían demorarse hasta el 7 de mayo próximo.

Si bien las autoridades del sector estaban en condiciones de convocar a la licitación a mediados de enero; las diferencias internas entre la secretaría de Energía, la macrista María Tettamanti, y el titular de la Agencia de Transformación de Empresas Públicas, Diego Chaher –ex interventor de Télam y antiguo gerente corporativo del Grupo Vila-Manzano-atrasaron más de la cuenta el proceso para la reprivatización de las hidroeléctricas.

Al llegar a la fecha límite sin poder cumplir con lo había dispuesto el decreto 895/24, la gestión libertaria sacó otro decreto para postergar la convocatoria a oferentes por otros 15 días más.

Javier Milei encontró la excusa

Si bien el comunicado de Energía sostiene que el nuevo plazo se estira ahora al 25 de abril, la letra chica del decreto 263/25 dejó abierta la posibilidad para que los días de postergación se contabilicen como hábiles, con lo cual la prórroga puede ampliarse hasta el 7 de mayo próximo.

El decreto lleva las firmas de Milei y del ministro de Economía, Toto Caputo, y justifica la medida en la solicitud formulada el 7 de abril por los gobernadores Rolando Figueroa, de Neuquén, y Alberto Weretilneck, de Río Negro.

El decreto sostiene que "resulta pertinente establecer un nuevo plazo para llamar a concurso público nacional e internacional, de modo que dichas provincias cuenten con un término razonable para que sus equipos técnicos puedan hacer un análisis completo del proceso que se inicia y así poder transmitir al Estado Nacional una acabada respuesta sobre el tema".

Tras tomar nota de la decisión de la administración libertaria, las autoridades provinciales reaccionaron pidiendo más tiempo para poder evaluar los pliegos y el plan de acción que quiere implementar Milei para transferir las centrales.

Neuquén y Río Negro, sin control de las usinas

Más allá de usar el argumento del pedido de participación de las provincias; la administración mileísta mantiene hasta ahora la posición de no atender los reclamos de Neuquén y Río Negro sobre el acceder al manejo y el control de las usinas.

Fuentes del sector consultadas por Letra P señalaron que, en el escenario político y económico que enfrenta al Gobierno, esta negativa podría modificarse con una admisión parcial de los planteos provinciales.

El cambio de postura podría materializarse con la cesión de una porción accionaria minoritaria que no afecte a las futuras sociedades controlantes de cada central, siempre y cuando las provincias desistan de las demandas presentadas por regalías hidroeléctricas que consideran fueron mal liquidadas en los últimos años.

Cuatro empresas para la reprivatización

Para la reprivatización de las centrales, técnicos del área energética crearon cuatro nuevas sociedades anónimas que corresponden a cada una de las usinas.

Chocón Hidroeléctrica Argentina SA, Alicurá Hidroeléctrica Argentina SA, Cerros Colorados Hidroeléctrica Argentina SA y Piedra del Águila Hidroeléctrica Argentina SA fueron constituidas con el objetivo de facilitar la transferencia directa de las acciones junto con los contratos de operación a las futuras concesionarias.

Las futuras concesiones tendrán una duración de 30 años y las empresas que resulten adjudicatarias deberán hacerse cargo antes del 11 de agosto, cuando expira la última prórroga anual concedida por la gestión libertaria a las actuales compañías controlantes.

En el caso de El Chocón, el 59% de las acciones están en poder del grupo italiano ENEL, accionista principal de Edesur. En la central Alicurá, el grupo estadounidense AES domina la sociedad controlante.

Cerros Colorados quedó, desde el año pasado, a cargo de la empresa local Aconcagua Energía; y la concesión de Piedra del Águila está a cargo del grupo Central Puerto, que tiene como accionistas a los empresarios Carlos Miguens, Guillermo Reca, a los hermanos Ruete Aguirre y a la familia Escasany.

Las claves de los pliegos

Según pudo confirmar Letra P, los pliegos licitatorios que el Gobierno está terminando de pulir contienen dos puntos clave.

Por un lado, incluirán una serie de obras de mantenimiento y mejoras obligatorias para las cuatro centrales que estarían valuadas entre u$s 150 millones y u$s 200 millones.

Por otro lado, prevén un nuevo esquema de remuneración compuesto por dos variables: un precio fijo dolarizado por un determinado porcentaje de la producción de cada central y otro porcentaje que las futuras operadoras podrán negociar libremente con contratos a término con grandes industrias y distribuidoras o mediante la venta directa en el mercado mayorista.

La porción regulada de los ingresos de las nuevas operadoras privadas irá bajando a medida que transcurra la concesión, mientras que la porción que se comercializa libremente crecerá hasta llegar al 100% de la generación entregada por cada central.

Fuente: Nota Editada en LetraP