
Con un verano a punto de concluir, en Cammesa ya piensan en el próximo desafío: cómo abastecer al sistema eléctrico el año que viene cuando haya todavía más demanda a raíz del crecimiento de la economía y evitar cortes masivos.
Si bien la temporada 2025 no terminó y no se descarta que pueda haber problemas en alguna semana de marzo, los pronósticos meteorológicos son alentadores y las lluvias de los últimos días trajeron algo de calma.
Este verano finalmente no fue tan grave como se esperaba, pero sin dudas el próximo aparece muchísimo más complejo. Con proyecciones que hablan de un incremento de la demanda eléctrica de casi dos dígitos y con un parque generador que prácticamente no incorporará nuevas centrales, en Cammesa ya están pensando cómo afrontar esta encrucijada.
Se perdió la oportunidad de sumar centrales térmicas
“Está previsto lanzar una licitación para construir centrales termoeléctricas, pero no van a estar listas hasta dentro de 4 años porque no hay más capacidad de fabricación de turbinas en el mundo. Argentina dejó pasar la oportunidad al dar de baja la última Terconf donde todavía existía disponibilidad de máquinas y ahora se va a tener que poner a esperar en la fila al fondo de todo”, explicaron a este medio fuentes allegadas a la compañía.
Donde sí hay un panorama más certero es en las obras de transmisión, donde ya se zanjó la discusión respecto al estampillado y está todo listo para iniciar la convocatoria al sector privado. “El Estado no va a poner plata ni a crear cargos adicionales. Lo financian las empresas con créditos externos y se cobra cuando se termine la obra y sólo en las regiones que se benefician”, sostienen.
De todos modos, su construcción también demoraría varios años y, por lo tanto, hay que idear nuevas alternativas. Una de ellas es incrementar la importación eléctrica desde Brasil con contratos en firme para que no puedan cortar los envíos.
Los barcos turcos
La otra idea que pica en punta es traer los famosos barcos turcos de la empresa Karpowership que generan electricidad in situ. “Ya lo estudiamos y se puede instalar perfectamente 200 MW en Dock Sud y 300 MW en la zona de Central Costanera con todas las instalaciones para que también puedan abastecerse de gas. Pero tenemos unas cinco alterativas de diferentes locaciones”, cuentan.
Esta solución es ideal para el AMBA que está al borde del colapso, con picos diarios que llegaron a los 10.700 MW este verano. “Si pasamos los 11.000 MW no hay posibilidad de abastecer la demanda”, explican los expertos.
La iniciativa fue descartada para este último verano por el alto precio, pero de cara al próximo no habría muchas más alternativas. “Cuando estás en una crisis y no tenes energía, el precio es secundario. Lo importante es garantizar el abastecimiento”, dicen.
En relación a la licitación de baterías de almacenamiento, desde Cammesa se mostraron críticos y cuestionaron que el pliego no tiene en cuenta medidas de seguridad básicas para estos sistemas. “Van a hacer competir por precio y no por calidad. Así es imposible que gane una empresa que cumpla con las mejores prácticas de seguridad que en el tema baterías es fundamental porque son muy peligrosas. Suelen prenderse fuego y, sin un sistema de aislamiento, si se enciende una, explotan todas”, alertaron.
Fuente: Más Energia