Por temor a un traspié en la Justicia, el Gobierno finalmente definió que los aumentos previstos para las tarifas de electricidad se aplicarán solo para los hogares de altos ingresos, que representan el 35% del total de usuarios residenciales (5,4 millones). Para ellos, la Secretaría de Energía más que duplicó el costo que pagarán por la generación eléctrica y las boletas de luz subirán más de 60% este mes, de manera retroactiva al consumo desde el 1° de febrero.
El aumento también alcanzará a los comercios y a las industrias, y se notará en las boletas que lleguen a partir del mes próximo.
La Secretaría de Energía publicó hoy en Boletín Oficial la nueva programación del precio estacional de la electricidad, que se actualiza de manera trimestral. La última modificación había sido en noviembre pasado, cuando el gobierno anterior, en modo electoral, decretó una baja del precio que pagan los usuarios, comercios e industrias por generar electricidad.
Desde noviembre a la fecha, el salto del tipo de cambio oficial implicó un fuerte aumento en los costos de la electricidad, ya que los contratos están fijados en dólares. Por lo tanto, el valor de referencia de la energía que informó hoy el Gobierno subió de $20.460 el MWh a $44.401; es decir, 117%.
Este aumento tiene un peso de alrededor del 40% en la boleta de electricidad y afecta por igual a los usuarios de ingresos altos (N1), comercios e industrias de todo el país. Los otros servicios que explican el precio final de las boletas son el costo de distribución y transporte eléctrico (para que la electricidad llegue al lugar de consumo) y los impuestos nacionales, provinciales y municipales, que varían según la jurisdicción.
Según la segmentación tarifaria aplicada durante la gestión anterior, los usuarios de poder adquisitivo alto son los que tienen ingresos familiares superiores a 3,5 canastas básicas totales, equivalente a $1,7 millones. Sin embargo, los usuarios que no se hayan registrado en el registro, también son considerados de ingresos altos.
Los usuarios de ingresos bajos (N2) y medios (N3) hasta un consumo de 400 kWh/mes seguirán pagando $2981 y $3756, respectivamente, hasta el 30 de abril. Esto significa menos del 9% del costo de generar electricidad. Por lo tanto, alrededor del 60% del total de hogares residenciales seguirá recibiendo más de 90% de subsidios de parte del Tesoro.
La decisión de mantener los subsidios actuales a los usuarios de ingresos bajos y medios es un cambio con relación a lo que había dicho el secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, en las audiencias públicas de enero pasado.
La intención inicial del Gobierno era avanzar con la quita de subsidios a todos los sectores e implementar a partir de mayo próximo la nueva canasta básica energética, que determinará la cantidad de electricidad y de gas que será subsidiada por decil de población y zona geográfica de residencia para aquellos usuarios en los cuales el gasto en energía supere el 10% de los ingresos.
“Los aumentos en los precios de energía eléctrica que se publicaron hoy marcan un cambio de rumbo del Gobierno, que había presentado en las audiencias una reducción de los subsidios en tres meses, entre febrero, marzo y abril, con el inicio de un nuevo sistema de aplicación de subsidios a partir del 1 de abril. Al final hubo un aumento de más del 100% del precio de la energía para los N1 y un congelamiento de los precios para los N2, N3″, dijo el economista Alejandro Einstoss, especializado en energía y servicios públicos.
“Esto marca la decisión del Gobierno de no tocar los sectores de ingresos bajos y medios, que actualmente cubren entre un 6 y un 8% del costo eléctrico y que en los próximos tres meses se van a licuar aún más por el efecto de la inflación. Es decir, van a terminar pagando precios ridículamente bajos; ya están por debajo de lo que se pagaba en diciembre de 2015. Sin embargo, lo que hay es un aumento importante en el resto de las categorías para industrias y comercios. Con lo cual, esta decisión le permite al Gobierno aumentar la cobertura total del sistema eléctrico y mantener el rumbo de reducir 0,5% del PBI de subsidios a la energía en 2024″, agregó el analista que coordina el Instituto Interdisciplinario de Economía Política de Buenos Aires (IIEP), que depende de la UBA y el Conicet.
En el Gobierno dijeron a LA NACION que el ahorro en subsidios se mantendrá, ya que los usuarios de altos ingresos, comercios e industrias son los que más electricidad consumen. Además, consideran que de esta manera no habrá ningún reparo de la Justicia y que hay margen fiscal para hacer una quita de subsidios más gradual.
“La necesidad de cumplir los objetivos de normalización en condiciones técnicas y económicas adecuadas para los prestadores y los usuarios de todos los segmentos de la cadena, y hasta tanto se lleve adelante la reasignación de subsidios conforme lo dispuesto por el artículo 177 del decreto N° 70 de fecha 20 de diciembre de 2023, se continuará con la agrupación de las categorías de usuarios y con el sendero gradual de reducción del subsidio al precio estacional de la energía eléctrica para su aplicación en el MEM [mercado eléctrico mayorista]”, dice la resolución 7/2024, publicada hoy.
“Que bajo criterios de prudencia y rigor en la determinación de los efectos en el usuario final, en esta instancia se mantendrá el subsidio vigente al precio estacional para los usuarios segmentados como Residenciales N2 y N3, sin sobrepasar los topes previstos en el artículo 2° del decreto N° 332/2022 en relación con los ingresos de los usuarios”, agrega.
En los próximos días, se espera que el ente regulador de la electricidad (ENRE) publique los nuevos cuadros tarifarios para Edenor y Edesur, y confirme el porcentaje de los aumentos tarifarios.
Se prevé, también, que haya una suba por el servicio que llevan adelante las distribuidoras y las transportistas, por lo cual el aumento final en las boletas será mayor.
“En el informe técnico obrante en las presentes actuaciones en febrero de 2019 el precio estacional [que pagan los usuarios] cubría el 79% del precio monómico del MEM [el costo de generar electricidad], descendiendo hasta el 57% a noviembre de 2023″, dice la resolución publicada hoy. Luego de la devaluación de diciembre, la demanda cubre en promedio menos del 45% del costo de generación.
“Según lo informado por el Ministerio de Economía el 26 de enero de 2024, la política de mantener un esquema de subsidios generalizados y crecientes en el tiempo, implementada a través de los Aportes del Tesoro, resulta incompatible con la situación financiera por la que atraviesan las cuentas públicas, por lo cual deviene imposible el mantenimiento de los aportes del Tesoro Nacional que funcionaron como un subsidio generalizado a toda la demanda implementada por las Administraciones anteriores”, agrega.
Fuente: La Nación