26/04/23

Buques paraguayos podrían ser interdictos o embargados por negarse a pagar el peaje en la Vía Navegable Troncal

Armadores guaraníes comenzaron a recibir las facturas por el tramo fluvial entre Santa Fe y Confluencia. Argentina dejó de mantener en forma gratuita una infraestructura que es utilizada casi exclusivamente por empresas extranjeras. El antecedente del año 2002.



Gran revuelo entre los armadores paraguayos. Sucede que, tal cual lo anunciado, comenzaron a recibir las facturas por peaje en el cobro de peaje en el tramo de la Vía Navegable Troncal (VTN) que va desde la zona comprendida entre el km. 584 del río Paraná, tramo exterior de acceso al Puerto de Santa Fe, hasta la altura del km. 1238 del río Paraná denominado Confluencia.

El importe es de u$s 1,47 por Tonelada de Registro Neto (TRN).

Este nuevo cuadro tarifario, aplicado por la Administración General de Puertos (AGP), en su carácter de empresa concesionaria, permitirá ejecutar las tareas para un eficiente sistema de señalización y de dragado en dicho tramo.

Por este tramo circulan 20 mil barcazas por año aproximadamente, con cargas regionales e internacionales, principalmente agrícolas, combustibles líquidos, minerales, entre otros, Estas provienen fundamentalmente desde Paraguay, por lo que, para el país vecino, este peaje costará más de u$s 40 millones, según estiman desde el sector exportador.

No es casual entonces que cámaras, empresarios y gremialistas guaraníes hayan alzado su voz en protesta a la decisión argentina.

Pero una cosa es el pataleo, y otra muy diferente es negarse a abonar el peaje en una VNT que corre enteramente por territorio argentino y que fue decidido por el gobierno argentino.

Lo que se sabe hasta ahora es que el Centro de Armadores Fluviales y Marítimos (Cafym). ha rechazado vía carta-documento las facturas del peaje, y que ante tal situación la AGP inició las primeras diligencias judiciales para hacer valer sus derechos.

"La interdicción y el embargo de buques es la última instancia. Antes agotaremos los reclamos administrativos y judiciales", señaló una fuente de AGP.

"Hay empresas que posiblemente pagarán las facturas bajo protesta, porque AGP informa que solicitarán la interdicción de las embarcaciones y si eso sucediera estará en riesgo nuestro comercio exterior. Podemos quedar desabastecidos de combustibles y de las materias primas para las industrias; nuestras exportaciones podrían estar paradas, sin generar los ingresos de divisas que eso implica. Es muy grave la situación", remarcó Esteban Dos Santos a ABC.

El antecedente de 2002

No sería la primera vez que sucede una instancia como esta. En 2002, cuando la Argentina salió de la Convertibilidad, el gobierno del entonces Presidente Eduardo Duhalde, dolarizó las tarifas relativas al comercio exterior como las de aeropuertos, puertos y peaje de la VNT entre otras. No obstante, varios armadores mantuvieron su postura de seguir pagando en pesos a pesar de que ya se había abandonado la paridad uno a uno con la moneda norteamericana.

Hidrovía SA, concesionaria de la VNT, recurrió a la Justicia quien la habilitó a embargar aquellos buques que no abonaran la tarifa en dólares como había sido dispuesto. La Prefectura Naval Argentina, como autoridad de aplicación, llevó a cabo las diligencias y es así como varias naves fueron embargadas. En poco tiempo quedó claro que las decisiones gubernamentales estaban para ser cumplidas y todo volvió a la normalidad.

La medida de cobrar peaje también busca reducir las asimetrías de la poco desarrollada marina mercante argentina frente a la de otros países. No más señalar que la fuerte expansión de Paraguay de las últimas décadas se construyó en base a fuertes rebajas impositivas para las navieras, que no tenían costo extra por utilizar la infraestructura que sostiene Argentina.

Los datos muestran además que, cobrando peaje únicamente a los barcos que navegan de Santa Fe al sur, o hasta Santa Fe desde el océano, se estaba subsidiando al tránsito de las barcazas que llegaban desde el norte. Las estadísticas son contundentes: menos del 10% del total de barcos que circulan por el tramo que ahora paga peaje -Confluencia-Santa Fe- son argentinos. Es decir, el Estado estaba manteniendo en forma gratuita una infraestructura que es utilizada casi exclusivamente por empresas extranjeras.

En ese marco, además, la gestión estatal viene encarando una serie de inversiones en todo el sistema de navegación, por lo que los cerca de u$s 20 millones que se espera recaudar servirían para generar esas y otras mejoras -que favorecen a todos los buques que transiten la vía, sea cual sea su origen-.

El nuevo peaje tiene además un plus: si un barco navega exclusivamente entre puertos argentinos, la tarifa pesificada será ínfima: $1,47 por cada TRN de carga. Eso genera un diferencial que ronda el 150 a 1, considerando que los barcos que tengan en su itinerario un puerto ubicado fuera del país pagan ese mismo monto, pero en dólares (u$s 1,47). De esta manera, empiezan a generarse incentivos para fortalecer la marina mercante argentina.

Esta iniciativa permitirá establecer un mecanismo de reinversión en la traza Actualmente, la AGP tiene a su cargo la operación para el mantenimiento del sistema de señalización y tareas de dragado y redragado de la VNT, y aplica la base tarifaria del peaje.

Asimismo, AGP informó que este tramo en particular requiere de inversiones para su modernización tecnológica integral, que han sido sucesivamente diferidas -lo que consecuentemente limita el tráfico nocturno y la previsibilidad en los calados navegables.

Fuente: El Cronista