Los ambiciosos planes que tiene Transportadora Gas del Sur (TGS) en Vaca Muerta tienen en el horizonte la exportación de gas y producción asociada. Además de las millonarias obras de infraestructura que están en marcha, y del proyecto modular de GNL que está en carpeta, la empresa analiza reconvertir su planta en Tratayén.
«Se prevé la conversión parcial y/o total de la planta Tratayén, actualmente en modo acondicionamiento, en una planta de procesamiento de gas natural», confirmaron desde la empresa en la última presentación de resultados operativos y financieros. Esto permitiría el transporte, fraccionamiento y despacho de líquidos desde algún puerto de la zona de Bahía Blanca.
Tal como anticipó este medio, la empresa planea este año ejecutar un plan de inversión de 270 millones de dólares para ampliar la capacidad de acondicionamiento de gas natural de su planta en Tratayén hasta unos 28 millones de metros cúbicos por día, a partir de 2024.
En números
270
millones de dólares invertirá la empresa para ampliar su planta en Tratayén.
De manera simplificada, lo que planea hacer la firma es convertir la planta (o parte de ella) con la que pone el gas en condiciones óptimas para inyectarlo a los gasoductos troncales, a una que se encargue de separar el etano, propano, butano, gasolina, agua, ect. contenidos en el gas. Es decir, el paso previo a acondicionarlo.
El proyecto de GNL es más complejo que lo esperado
El otro proyecto que tiene la firma del grupo Pampa Energía para el corto plazo es el desarrollo de una planta de GNL en conjunto con Excelerate. Con esta planta buscan favorecer la exportación del gas natural que se produce en Vaca Muerta.
«TGS está trabajando en la ingeniería de este proyecto que es bastante complejo y demoró más de lo que esperábamos originalmente. Pero estamos trabajando con varias empresas internacionales para que nos ayuden en la ingeniería del proyecto», confirmó el CEO de Pampa Energía, Gustavo Mariani, consultado por analistas en la última presentación de resultados.
Por la escala de este proyecto, las empresas apuestan a operar en el mercado de spot de GNL y, para poder hacerlo, necesitan que sea competitivo a nivel internacional. Serán clave, entonces, los incentivos fiscales que se aporten mediante legislaciones, como también la flexibilización de los permisos de exportación.
«El proyecto que estamos imaginando es pequeño en comparación con los grandes proyectos que se ven en otras partes del mundo. Entonces hay un problema de escala que lo hace menos competitivo», concluyó Mariani.
Dado el avance en la ingeniería del proyecto, para las autoridades de Pampa y TGS todavía es «muy pronto» para especular sobre los detalles finos del proyecto y de la inversión que demandará.
Esperan «con suerte» tener más precisiones hacia mediados de año, y ahí sí definir si siguen adelante o no con el proyecto.
Fuente: Rio Negro