El presidente Alberto Fernández, junto a funcionarios nacionales, provinciales, municipales, y referentes de YPF y de Pampa Energía, inauguraron una ampliación en la Central Térmica Ensenada Barragán. La inversión, de US$250 millones entre ambas compañías, sirvió para que la potencia instalada alcance el equivalente al consumo de 1,5 millones de hogares.
Las obras se realizaron para llegar a un ciclo combinado de 847 MW, con lo que la central se habría convertido en una de los cuatro más grandes del país, de acuerdo con lo informado por las empresas. En el Gobierno aseguran, además, que permitirá ahorrar US$350 millones en divisas por importación de energía.
Durante el acto de inauguración estuvieron presentes, además de Fernández, Pablo González, presidente de YPF; Marcelo Mindlin, presidente de Pampa Energía; Flavia Royón, secretaria de Energía, y Mario Secco, intendente de Ensenada.
El ciclo combinado, que suma 280 MW a los 567 MW con los que ya contaba la central, tiene la ventaja de generar mayor cantidad de electricidad sin consumir más combustible, ya que la turbina de vapor es alimentada por los gases que emanan las turbinas de gas existentes. “Este proceso permite mayor eficiencia en la generación y contribuye a la sustentabilidad del sistema eléctrico nacional”, indicaron.
La Central Térmica Ensenada Barragán fue adquirida por Pampa e YPF en 2019.
“Creo que esta planta es útil para que nos ayude a reflexionar a todos sobre el momento que estamos viviendo en el mundo, que esta viviendo la Argentina”, dijo el Presidente durante el acto esta mañana. Entre sus menciones, se refirió a la vicepresidente: “Nosotros tuvimos la suerte, en los años de Cristina presidenta, que YPF pudiera detectar la existencia de Vaca Muerta, de tener allí el segundo reservorio de gas no convencional del mundo, que garantiza gas para todos los argentinos”.
“Hablo con Lula [presidente de Brasil], hablo con [Luis] Arce [presidente de Bolivia], hablo con [Gabriel] Boric [presidente de Chile], que le empezamos a vender petróleo y gas. Podemos darle gas a Chile hoy, con un acuerdo en firme, que en algún momento se quebró, pero lo estamos haciendo. Podemos proveer de gas a Europa, que le falta con motivo del conflicto bélico. También esta energía nos va a permitir transformar el Norte porque está uno de los minerales más buscados, el litio, fuente de energía enorme”, agregó.
Por su parte, Mindlin, titular de Pampa, mencionó durante su discurso: “Todos los gobiernos respetaron los contratos vigentes desde 2009 y 2010. Su gobierno [el de Fernández] lanzó el Plan Gas 5, pero el primero fue en 2013 y todos fueron respetados. Esa es la importancia de la confianza para seguir invirtiendo”. También puntualizó que la empresa pasó de producir seis millones de metros cúbicos de gas a 16 millones por el plan oficial.
Otro de los focos abordados fue el avance en la obra del gasoducto Néstor Kirchner. Una obra así “requiere de dos años de construcción”, según Mindlin, pero el plazo comprometido con el Gobierno es de 10 meses. Si bien se mostró optimista respecto del cumplimiento de los tiempos pautados, planteó que será un desafío llegar al invierno de este año. “En los últimos 12 años, el gasto en importación de energía ascendió a US$75.000 millones, que fueron a parar a otros países. En los reservorios teníamos esa energía. El gasoducto va a cambiar esa historia”, dijo.
González, presidente de YPF, señaló: “Estas inversiones en infraestructura energética, como las que estamos haciendo en otras partes del país, nos permiten generar la energía confiable y eficiente que el país necesita. En este caso, con menos gas vamos a generar más energía eléctrica en una zona de alto consumo industrial y residencial”. Además, hizo hincapié en que la inversión fue posible por el “saneamiento” de los números de la empresa a partir de 2019.
“Es un año en el que tenemos que ser conscientes de la importancia del ahorro energético. El 2023 es un año de transición. Seguro va a ser complejo, vamos a requerir algunas importaciones, pero estamos encaminados a una soberanía energética y a poder dar vuelta la balanza”, aportó por su parte Royón.
Por otra parte, Mindlin aseguró que Pampa Energía no tiene interés en los activos de la empresa italiana Enel, de energía eléctrica, que comenzó la retirada del país después de más de 14 años. En los próximos días se anunciará la venta de dos de sus centrales térmicas, Costanera y Dock Sud, y también empezará el proceso para desprenderse de la distribuidora Edesur. Pampa Energía no ofertará, según su CEO, debido a que se encuentra focalizada en mejorar su producción de gas en Vaca Muerta.
Sin embargo, el empresario destacó que será “imprescindible” la aprobación de la ley de hidrocarburos, que se encuentra en el temario de sesiones extraordinarias del Congreso, para que se concreten esas inversiones de 30 o 40 años de plazo. “Si no se aprueba la ley, es muy difícil, porque es una actividad nueva”, aseguró.
Por último, comentó que ya que todos sus contratos se encuentran ligados al dólar oficial, que generalmente acompaña a la inflación, la volatilidad de los tipos de cambio libres “no impacta demasiado” en el desarrollo de la actividad, como tampoco los afectará el juicio político a los miembros de la Corte Suprema en el caso de las inversiones de la empresa en el futuro, aseguró Mindlin ante la consulta de los periodistas.
Fuente: La Nación
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