15/03/22

¿Qué es el TTF? El gran mercado del gas mundial


Terminal de gas en Rotterdam donde participó Sener. FOTO: Sener.

Es bien sabido que en el Mar del Norte se encuentra uno de los grandes yacimientos de gas natural del mundo, perteneciendo una parte del mismo a las aguas territoriales de los Países Bajos (Netherlands, también llamado a veces Holanda, si bien Holanda en sentido estricto es solo una región de este país). De hecho, desde que se iniciase su explotación en la década de los años 70 del pasado siglo se calcula que a los Países Bajos les ha reportado la venta de gas natural unos ingresos en torno a 160.000 millones de euros, estimándose que solo se habrían extraído por el momento la mitad de las reservas existentes.

Con un peso económico de tal magnitud no resulta extraño que el principal mercado de gas europeo, que sirve como referencia al resto de países de nuestro entorno europeo, pero también en buena parte del mundo, tenga su origen en aquel país.

Estamos hablando del mercado TTF, conocido por estas siglas que son acrónimo de su nombre real: Title Transfer Facility. Y lo vamos a conocer un poco mejor en este artículo.

La realidad geológica es que las reservas conocidas en otras regiones del mundo, especialmente en Rusia pero también en la zona del golfo pérsico, del golfo de Omán, de Norteamérica, del golfo de México o bien de Suramérica son muy superiores a las del Mar del Norte, pero aun así la importancia de este mercado TTF como referencia mundial de precios es muy relevante.

¿Quién creó el TTF?

Fue fundado en el año 2003 por Gasunie, la compañía holandesa propietaria de la infraestructura para el transporte de gas natural de los Países Bajos y Alemania. Esta compañía fue a su vez constituida en el año 1963 por grandes operadores energéticos privados (Royal Dutch Shell y Exxon Mobile con el 50% del capital) y por el Estado de Países Bajos (con el otro 50% del capital).

El objetivo de Gasunie era establecer un mercado de compraventa de gas al por mayor en euros que facilitase la determinación de precios para esta materia prima en Europa, imitando en buena medida al mercado de gas de Reino Unido, el conocido como NBP (acrónimo de National Balancing Point) que funcionaba en libras desde el año 1996.

¿Cómo funciona el TTF?

Se trata de un punto virtual de intercambio de gas, lo cual podríamos definirlo por contraposición a un punto físico de intercambio de gas.

Es decir, la materia prima se transporta a lo largo de Europa por gaseoductos principalmente, y de forma más residual en barcos metaneros o sistemas alternativos que requieren labor de regasificación. Igualmente, se transporta y distribuye ya dentro de cada país y para llegar al cliente final, a través de redes de distribución en media y baja presión.

Así, los contratos de compraventa se podrían realizar en puntos de intercambio físico locales, implicando la entrega del gas natural en un determinado punto de la red y con un perfil concreto y específico (en unidades de MWh, de días de entrega, etc…).

Pero también se pueden realizar contratos estandarizados en un punto virtual de intercambio. A esta segunda tipología de mercado se corresponde el TTF, a un mercado de punto virtual en el cual las características de cada contrato están estandarizadas (las unidades de MWh, de días de entrega, etc.. están delimitadas de antemano).

¿Cómo son los contratos negociados?

Se trata de contratos estandarizados a futuro, es decir, para entrega de gas en un momento del tiempo concreto en el futuro.

Una de las modalidades de contrato más utilizado en TTF es el mensual, por lo que nos servirá para entender el funcionamiento general de los contratos. Cada uno de esos contratos implica la entrega de 1 MW de gas cada día, multiplicado por las 24 horas al día (podría haber días que se multiplicase por 23 o 25 horas en el cambio de horario de verano o invierno) desde las 6:00 h (horario Europa central) del primer día de un mes hasta las 6 h del primer día del mes siguiente. Su precio se determina en euros y céntimos de euro por MWh, y es obligatorio negociar al menos 5 MW para poder operar.

El tick o valor mínimo de cotización al alza o a la baja de los contratos es de 0,5 céntimos de euro por MWh (€0.005/MWh).

Si en vez de utilizar el contrato mensual utilizásemos un contrato diario, mensual, anual, o para otro período temporal, el concepto sería similar y solo variaría la duración del período de días de entrega, en función del tipo de duración del contrato.

¿Qué cualidades financieras tienen estos contratos?

Es importante entender este punto, ya que los contratos negociados no son para entrega “spot” o al contado, es decir, de un día para otro o bien en el mismo día. Sino que se trata de contratos a futuro o bien de opciones también a futuro. Es por ello por lo que creo que podemos afirmar que tienen cualidad de contratos financieros (a semejanza de los futuros y opciones financieras).

En el caso de los futuros, hablamos de un contrato que implicará la entrega de gas durante un tiempo determinado y en un momento futuro determinado, según lo descrito en el punto anterior (por ejemplo el contrato de entrega mensual la entrega podría ser durante el mes siguiente al momento de la negociación).

En el caso de las opciones, denominadas Call por su nombre en inglés, no implica la entrega de la materia prima, como los futuros, sino solo el derecho a exigirla. Es decir, si llegado el vencimiento (el momento de la entrega del gas natural) el comprador tiene la opción de exigir el cumplimiento, pero al ser un derecho puede desistir de su ejecución (principalmente porque en ese momento el precio al contado le fuese más ventajoso que el de ejecutar la Call).

¿Qué características tiene el gas natural negociado?

El Gas natural es un hidrocarburo que comparte su origen con el petróleo, dado que se encuentra geológicamente en los mismos yacimientos, y que está compuesto principalmente por metano mezclado con cantidades inferiores (que varían) de otros alcanos como etano, propano, butano, dióxido de carbono, pentano, sulfuro de hidrógeno, dióxido de carbono, nitrógeno o helio.

En el caso del TTG, se intercambian cuatro calidades de gas, aunque en la práctica existen solo 2 grandes bloques de contratos:

L-Gas o G-Gas: gas producido internamente y usado por el mercado interno de Países Bajos, para clientes residenciales o empresariales.

H-Gas: gas producido fuera de las costas nacionales de Países Bajos, o bien importado de Noruega, Reino Unido o Rusia. Para la venta a los generadores eléctricos, a los clientes industriales, o bien a la exportación.

El mercado de H-Gas es con diferencia el principal y de mayor uso por los trader internacionales, siendo más residual, acotado al mercado interno evidentemente, la negociación de contratos de L-Gas o G-Gas.

¿Por qué puede resultar interesante la indexación a TTF para el cliente final?.

Las compañías energéticas suelen utilizar el TTF para cubrir riesgos de precio a futuro, pues no pueden dejar abiertas todas sus posiciones dado que deben suscribir contratos de largo plazo para suministro a sus clientes, usuarios finales de la energía.

Pero al cliente final le puede interesar o bien optar por un precio fijo con su compañía suministradora, lo cual será habitual cuando debe mantener un presupuesto anual cerrado, o por el contrario optar por un precio indexado (que queda abierto a una revisión normalmente mensual o bien trimestral del precio del contrato de suministro).

Y en este último caso se planteará la cuestión de si el TTF es un buen referente para esa indexación a mercado.

En muchos casos en España la indexación ha venido siendo referenciada a la cotización del barril Brent de petróleo más el tipo de cambio euro/dólar. Se ha utilizado esta referencia tradicionalmente por la alta correlación entre el petróleo Brent, que se extrae de los yacimientos del Mar del Norte, y el precio del Gas en Europa. Y se complementa con el tipo de cambio por el hecho de que la cotización internacional del barril Brent es en dólares mientras que los contratos europeos lógicamente se suelen denominar en euros.

Pero el problema es que esa correlación se ha ido perdiendo, por el hecho principalmente de que el mercado de petróleo es un mercado en buena medida financiero, utilizado por agentes financieros que no buscan realmente el intercambio de materia prima sino más bien objetivos de trading financiero, lo cual distorsiona dicha correlación que se le solía tribuir.

Sin embargo, por el contrario, el mercado TTF es hoy en día más utilizado en buena medida por agentes que no buscan un trading financiero sino el intercambio real de gas natural. Por lo cual se tiende a mantener más fiel al valor real de la materia prima que el mercado de barril Brent, siendo ello más conveniente a la opción de indexación por parte del cliente final en caso como apuntábamos de indexar el precio de su contrato de suministro hoy en día.

Fuente: El Periódico de la Energía