02/09/21

PAR.AR: Transporte le hizo un guiño a Hugo Moyano y creó un sistema de paradores estatales en las rutas

El Gobierno creará playas de servicios a lo largo de todo el país para el transporte de carga mediante predios con seguridad, gastronomía, logística y descanso, entre otras cosas.


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La gesta burocrática argentina no frena. Todos los días se suma una capa al Estado con algún invento nuevo que agrega más trámites, discrecionalidad y, cómo no va a estar, presupuesto. Hoy no fue la excepción y hay dos nacimientos que formarán parte de los pliegues administrativos. Uno, con tufillo fuerte a Hugo Moyano; el otro, destinado a la comunidad artística. Ambos tienen dos puntos en común: trámites y presupuesto.

Mediante una resolución del Ministerio de Transporte creó el “Programa Puntos de Asistencia en Ruta al Autotransporte Registrado (PAR.AR)”, un esquema diseñado para “brindar asistencia técnica, económica y financiera a los gobiernos provinciales, municipales y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires con el objeto de diseñar y desarrollar puntos de asistencia en ruta en todo el territorio nacional con criterio orgánico e integrador”.

En resumen, el Gobierno, mediante este sistema, creará playas de servicios a lo largo de todo el país para el transporte de carga mediante predios con seguridad (vigilancia), gastronomía, logística, descanso y estaciones de servicio, gomería, repuestos, etc. Algo así como la estatización de todo lo que se ofrece para transportistas y viajeros al lado de la ruta.

El otro es un canto a la esperanza. Se trata del programa “Argentina Florece” de la Secretaría de Cultura. “Argentina Florece es un programa de alcance federal, orientado a reconstituir los lazos existentes entre cultura y comunidad, con miras a recuperar los niveles de participación, alterados durante el curso del actual contexto sanitario”, dice la norma mediante la que se presentó en sociedad.

La pregunta que surge es qué se puede hacer ahora, a través de estas herramientas, que antes no era posible. Pero más allá de las respuestas, la administración pública argentina es una formidable máquina de crear programas. En lo que va del año se han creado, al menos, medio centenar de “programas” destinados a los fines más diversos que se puedan imaginar. El camino de cada uno es conocido: presupuesto propio, jefes políticos a cargo, empleados estatales y, claro está, procedimientos y mesas de entradas para inscribirse y acceder a los beneficios del soberano.

PAR.AR, un viejo sueño de Moyano

El desarrollo de dicho Programa entonces, permitirá garantizar el acceso a una red nacional de servicios de asistencia y seguridad a las unidades de transporte de cargas, que contemple además la posibilidad de producir sinergias con otras instalaciones de transporte de pasajeros del “Programa de Infraestructura Nodal para el Transporte Público de Pasajeros (PIN)” a efectos de propender a la sostenibilidad económica de las infraestructuras en el tiempo.

El PAR.AR, que hasta tiene como anexos los renders y las caracterizaciones de los espacios, será una iniciativa pública en medio de las rutas mediante los llamados Punto de Asistencia en Ruta o Paradores. “son instalaciones físicas adyacentes a los corredores viales que cuentan con infraestructura de servicios de calidad”. Sin demasiado esfuerzo intelectual para el desarrollo normativo, el Ministerio de Transporte establece que estos paradores podrán ser “pequeños, medianos, grandes o interfases logísticas”. A esta última la define como “Puntos de Asistencia de mayor tamaño ubicados cerca de centros atractores de carga (como pueden ser puertos, fábricas, polos industriales o grandes ciudades), en cuyo caso la localización dependerá más de la eventual articulación con dichos centros que de la cercanía a una ruta”.

Según uno de los anexos, el Estado firmará acuerdos con provincias y municipios para autorizar y, además, financiar un porcentaje del parador estatal. Maravillas para los camioneros y los municipios; dolor de cabeza para miles de comerciantes que se ganan la vida sobre las banquinas.

Ventanilla única de trámites

Pero más a allá de que estos puestos tendrán servicios varios, un par de considerandos que están en uno de lo anexos fueron resaltados por varios conocedores del tema. Se trata de la ventanilla única de trámites. Desde hace años, el líder camionero Hugo Moyano, anhela ver en funcionamiento esa ventanilla única. Pues lo logró con el PAR.AR que le creó a medida el ministro Alexis Guerrera. Dentro de los servicios que establece la norma que debe tener cada uno de los paradores estatales está el logístico. Y luego lo define: “Ventanilla única de trámites logísticos y administrativos”. Música para los oídos del sindicato.

De acuerdo a lo que se conoce el PAR.AR “será llevado adelante con fondos provenientes de las diferentes partidas presupuestarias con las que contare el Ministerio de Transporte”. Por ahora, no hay detalles del monto que se destinará.

En lo que podría ser un compendio de obviedades, la norma establece que “en relación con la morfología del terreno, se reconocen dos posibles tipologías: paralelos a la carretera o bien perpendiculares donde se cuente con disponibilidad de terrenos por fuera de la zona de camino”. “Los mismos pueden presentar, a su vez, un tipo de implantación unilateral (a un solo lado de la carretera) o bien, bajo un esquema doble o mancuerna, a ambos lados”, agrega y luego se despachan con prolijas animaciones de los paradores.

Argentina Florece

El otro programa creado hoy es Argentina Florece. “El objetivo es desarrollar, fomentar e implementar actividades y acciones culturales multiformes, en todo el territorio nacional, que coadyuven a la reactivación del sector cultural, y de las economías regionales asociadas a la cultura, promoviendo simultáneamente la revinculación de las comunidades con todas las expresiones derivadas de la actividad del sector, y privilegiando la igualdad de oportunidades en la producción, disfrute y acceso de dichas expresiones”.

En agosto, el Ministerio de Cultura llamó a concurso para postularse al programa “Práctica”. El sistema “tiene como destinatarios a personas jóvenes que hayan completado el curso del nivel secundario de educación formal obligatoria, aunque adeuden materias, para quienes las dimensiones del aprendizaje y el trabajo adquieren un valor estratégico dentro de un modelo de desarrollo integral e inclusivo, siendo la educación, la formación y los procesos de apoyo a la inserción en el mundo del empleo de calidad fundamentos claves para el logro de la deseada igualdad de resultados”. Así, sin puntos, con objetivos amplios.

El 3 de agosto, el ministro Tristán Bauer ya venía de otra fundación. Se trata del Programa Impulsar II, “destinado a personas humanas y jurídicas representantes de elencos, bandas, compañías y/o productores para fomentar la producción de espectáculos escénicos a realizarse entre los meses de noviembre de 2021 y abril de 2022, en espacios, salas o predios con aforo de más de 300 localidades del territorio nacional”. Ese impulso se financiará con un aporte del Tesoro de $125 millones. Ahora se suma un programa más, Florecer. Al menos, los creadores de nombres, tienen cada vez más trabajo en este cuarto kirchnerismo.

Fuente: La Nación