17/05/21

Los subsidios a las tarifas costarán $370.000 millones más que lo que presupuestó Guzmán

El instituto Mosconi calculó que el Estado necesitará USD 10.000 millones para cubrir el costo de producción. Es un déficit adicional del 0,7% del PBI.



Los subsidios a la energía llegarán en 2021 a los 10.000 millones de dólares equivalentes al 2,4% del PBI, informó el instituto Mosconi. Esta cifra implica un gasto de $370.000 millones más en subsidios que el 1,7% del PBI que presupuestó el ministro de Economía, incluso sin contemplar los nuevos subsidios que promueve el kirchnerismo en el Congreso.

De acuerdo al informe de Alejandro Einstoss y Julián Rojo, los subsidios tomaron una dinámica propia y vienen creciendo a un promedio del 50% interanual. Entre abril del año pasado e igual mes de este año, se fueron 6.700 millones millones de dólares en subsidios a la energía. En especial, a CAMMESA, la estatal mayorista de electricidad a la que el Estado nacional cada vez le tiene que girar más recursos para cubrir la brecha entre lo que cuesta la energía y lo que los consumidores la pagan.

En efecto, el ritmo de transferencias a CAMMESA se aceleró al 70% anual en dólares y sumó 4.771 millones de dólares en abril si se toma el dato anualizado. Sin aumentos que cubran la generación de la energía eléctrica, "para finales de este año, los subsidios cubrirán el 70% del costo de generar energía lo que demandará partidas presupuestarias adicionales no previstas en el presupuesto del orden de los $140.000 millones".

"El riesgo es que esa aceleración se transforme en un tsunami de subsidios como el que ya enfrentó la economía entre el 2010 y 2015, al que podríamos denominar la ‘primera ola de subsidios'", advirtieron en el instituto Mosconi. La evidencia muestra que los subsidios ya están en el nivel de fines de la primera presidencia de Cristina Kirchner y las proyecciones sin aumentos adicionales sobre la luz y el gas apuntan a recuperar el nivel de subsidios del 2015.


La mayor carga de subsidios obedece a que las tarifas se están utilizando como ancla para contener la inflación que viene muy por encima del 29% proyectado por Guzmán. Y también a que, el 9% que determinó el ENRE para Edesur y Edenor va a cubrir los costos de distribución, pero no la diferencia entre el costo de producción de cada megavatio y lo que se paga por la generación de energía en las tarifas. Y por eso, este aumento no desacelerará el crecimiento de los subsidios.

Similar es la situación de los subsidios al gas. Los aumentos del 4% a las industrias y del 6% a los usuarios domiciliarios apuntan a cubrir los costos de las distribuidoras, pero no de la generación de gas, que ya viene en declive. Y menos incluso, los costos de importar gas y gasoil para el invierno en el actual contexto de restricción de dólares.

De hecho, de acuerdo a los investigadores, para mantener los subsidios en torno al 1,7% del PBI, sería necesario un aumento adicional del 20% en las boletas de gas y de luz. Esto permitiría un aumento del 40% en el precio de la energía y una cobertura de subsidios en línea con lo previsto originalmente en el presupuesto.

Fuente: La Política on Line