05/06/24

Milei reconfigura los subsidios de luz y gas con aumentos de hasta 170% para los hogares de ingresos bajos y medios

La Secretaría de Energía puso en marcha un nuevo “esquema de transición” con fuerte quita de subsidios para los hogares N2 y N3. Aumentos en juego y recorte de consumos bonificados.

Por Antonio Rossi




Por medio de cuatro resoluciones de la Secretaría de Energía que conduce Eduardo Rodriguez Chirillo; el Gobierno de Javier Milei comenzó a reconfigurar el esquema de subsidios de los servicios de energía eléctrica y gas con nuevos “cuadros tarifarios de transición” que implicarán para los usuarios residenciales aumentos en sus facturas finales que oscilarían entre 10% y el 170%.

Bajo el paraguas normativo del decreto 465/24 que habilitó la reestructuración de los regímenes de subsidios heredados del massismo; la administración mileísta aprobó tres cambios tarifarios salientes destinados a: actualizar los precios mayoristas de la electricidad y el gas; establecer un nuevo mecanismo de descuentos diferenciados y recortar los niveles de consumos bonificados.

Si bien las medidas alcanzan a todos los usuarios residenciales, los más afectados serán los hogares de bajos recursos N2 y de clase media N3 porque afrontarán los aumentos más elevados y, encima, perderán la mayor parte de los consumos bonificados que tenían desde agosto de 2022.

En el servicio eléctrico, los incrementos tarifarios van camino a generar un incremento final en las facturas de los usuarios residenciales que arranca en el 15% para los hogares de mayores recursos N1 y trepa hasta el 170% en el caso de los sectores medios N3.

Por el lado del sector gasífero, los aumentos finales que se registrarían en las boletas residenciales van del 10% para los hogares N1 hasta un 80% para los usuarios de bajos recursos N2.

EL AJUSTE ELÉCTRICO

El nuevo precio estacional de la energía quedó fijado en $57.214 por megawatt por hora (MWh) para todos los usuarios residenciales.

Para los hogares de mayores ingresos agrupados en el Nivel N1—que ya venían pagando una tarifa más elevada y con un mínimo nivel de subsidio--, el nuevo precio de la energía mayorista registrará una suba de 29%, llevando el valor vigente hasta ahora de $ 44.401 a $ 57.214 por MWh, con un impacto promedio del 15% en la factura final.

Los hogares de ingresos bajos (Nivel 2) recibirán un subsidio equivalente al 71,9%; mientras que para a los hogares de clase media (Nivel 3), la bonificación será del 55,9%.

Con esos nuevos niveles de subsidios, el precio de la energía mayorista para los usuarios N2 aumentará un 439% y pasará de $ 2.981 a $16.074 por MWh. Esa suba tendría un impacto en la factura final del orden del 130%.

En tanto, para los hogares N3, el incremento del valor mayorista de la energía llegará al a 571% y subirá de $ 3.756 a $ 25.219 por MWh, con un impacto en boletas finales del orden del 170%.

Junto los aumentos del precio mayorista y el nuevo esquema de subsidios, la administración mileísta introdujo dos cambios sustanciales para restringir los niveles de consumos que tenían bonificados los clientes N2 y N3.

A partir de ahora, los hogares de bajos recursos N2 --que tenían la totalidad de los consumos bonificados --sólo tendrán subsidiados los primeros 350 kWh mensuales. Lo que supere ese límite será facturado al valor de la energía mayorista N1 de $ 57.214 por MWh, lo cual equivale a un incremento de 1.800% con respecto a lo estaban pagando anteriormente.

Para los hogares de sectores medios N2, el tope de consumo bonificado que estaba en 400 kWh mensuales se reduce 250 kWh mensuales. Por encima de ese nivel, correrá el valor mayorista N1 que representa una suba de casi 1.500% comparado con el precio de la energía subsidiada que estuvieron pagando hasta ahora.

EL AJUSTE DEL GAS

En el caso del servicio gasífero, el Gobierno libertario resolvió incrementar el precio dolarizado del gas un 14%, pasando de 2,94 US$ por millón de BTU (MMBTU) a US$ 3,34 por MMBTU.

Ese precio pleno es que el abonarán los hogares N1, mientras que para los hogares N2 regirá una bonificación del 64% y pagarán el equivalente al 36% del nuevo precio del gas en boca de pozo. En tanto, para los sectores medios N2, la bonificación inicial será del 55%, pasando a pagar el equivalente al 45% del nuevo precio dolarizado del gas

El traslado de esos ajustes generará en las facturas finales los siguientes aumentos con respecto a las boletas actuales:

  • Entre 8% y 10% para los usuarios residenciales N1.
  • Un promedio de 80% para los hogares N2.
  • Alrededor de 70% para los sectores medios N3.
Al igual que en el servicio eléctrico, las autoridades energéticas también procedieron a recortar los consumos bonificados. Los hogares N2, que no tenían ningún límite, pasan a tener los mismos topes de consumos subsidiados concedidos a los N3, los cuales varían mensualmente y según las zonas geográficas. Los consumos que excedan los techos bonificados establecidos para cada lugar se abonarán al valor pleno del gas que rige para los hogares N1.

Nota Editada en LetraP