25/01/24

El tarifazo de Javier Milei que viene: cuánto se pagará por la luz desde febrero

Una audiencia pública tratará los aumentos para Edenor y Edesur. Quita de subsidios, cambios e impacto en las boletas. El costo de la energía en todo el país.

Por Antonio Rossi



Javier Milei y el tarifazo a la energía eléctrica NA

En medio de las negociaciones que rodean al tratamiento de la ley ómnibus, la administración del presidente Javier Milei comenzó a transitar la cuenta regresiva para definir los aumentos tarifarios que regirán desde febrero para las empresas Edenor y Edesur; y el precio de la energía que pagarán las personas usuarias de todo el país tras el decretazo, el Caputazo y la quita de subsidios a clientes residenciales prevista por el secretario del área, Eduardo Rodríguez Chirillo, para reducir el déficit fiscal.

Si bien aún faltan conocer los datos clave sobre el nuevo valor de la energía mayorista y la quita de subsidios que tendrá la clientela residencial, los primeros cálculos de especialistas del sector consultados por Letra P indican que los aumentos finales para los hogares del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) podrían oscilar entre un 200% y 350%.

Estos incrementos en las tarifas de las compañías eléctricas llegan acompañados de subas estimadas del 420% promedio para las boletas de gas y del 250% previsto para los colectivos y trenes.

Audiencias y exigencias

El Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) convocó para este viernes a una audiencia pública para tratar las mejoras “transitorias” que solicitaron las distribuidoras metropolitanas a fin de operar y garantizar el servicio durante este año. Consultadas fuentes del sector aseguraron que los pedidos de ingresos adicionales que solicitaron las distribuidoras equivaldrían a una suba de entre el 100% y el 150% en los aumentos finales.

A esa convocatoria virtual, no vinculante, se añadirá otra similar agendada para el lunes 29 de enero para conocer los aumentos requeridos por las transportistas eléctricas. Luego de evaluar los gastos operativos y las inversiones que propongan las empresas; el ente regulador deberá definir contrarreloj los porcentajes definitivos de aumentos que irán a parar a las cajas de Edenor, Edesur y las empresas que operan las redes de distribución energética.

A esas subas se agregarán otras dos variables que empujarán hacia arriba las facturas eléctricas. Una es la actualización del valor de la energía mayorista que, según la programación estacional febrero-abril que estimó la Compañía Administradora del Mercado Eléctrico (Cammesa), debería trepar un 140% para compensar el impacto en que produjo la devaluación inicial del Caputazo en los costos de generación. La otra es la poda de subsidios para los clientes residenciales.

Eliminación de subsidios

Al igual que lo anunciado para el sector gasífero, la intención de la Secretaría de Energía es eliminar los subsidios eléctricos entre febrero y abril con reducciones mensuales del 33%. Esa medida iría atada a un cambio de fondo del actual esquema de subsidios, que está basado en la segmentación de tres niveles residenciales: N1 altos ingresos, N2 bajos ingresos y N3 sectores medios.

Las autoridades energéticas buscan reemplazar ese esquema por una nueva fórmula que tomará en cuenta los ingresos totales de cada hogar y el consumo mínimo de electricidad que necesitan mantener bonificado. Quienes superen ese tope subsidiado, pagarán por el excedente la tarifa plena.

El plan del la administración mileísta es que el nuevo mecanismo de subsidios entre a tallar a partir de mayo con una audiencia pública previa, que sería convocada entre marzo y abril.

A diferencia de las gasíferas que debieron decir qué porcentajes de aumentos específicos necesitaban para este año, las distribuidoras metropolitanas sólo tuvieron que presentar para la audiencia pública el monto de los ingresos que requieren para operar y mantener el servicio a lo largo de 2024.

Mecanismo de ajuste mensual

Edenor -controlada por el grupo empresarial de José Luis Manzano, Daniel Vila y Mauricio Filiberti- solicitó una recaudación adicional de $521.303 millones. De ese total, $174.353 millones corresponden al plan de inversiones; mientras que los restantes $346.950 millones forman parte de los costos operativos, el pago de salarios y los gastos administrativos y financieros. A esa suma, los dueños de Edenor le agregaron como extra otro aporte estatal de $312.493 millones para pagar las deudas que arrastran con Cammesa, por la falta de pago de la totalidad de las facturas de energía recibida del sistema eléctrico.

Por el lado de Edesur—la empresa manejada por el grupo italiano ENEL—, la suma estimada para cubrir los gastos y obras de este año alcanza a $469.500 millones. De ese monto, $167.000 millones se irán en movimientos financieros, impuestos y caja chica; $114.500 millones se destinarán a inversiones directas; $111.000 millones, a materiales y contratistas; y $77.000 millones, al pago de salarios y exigencias del ENRE.

Más allá de los montos solicitados, las dos distribuidoras coincidieron en reclamar un mecanismo de ajuste mensual que dispare la actualización de sus ingresos específicos de manera automática y sin pasar por audiencia pública.

Nota Editada en LetraP